La estrella del fútbol americano adquirió un Wajer 55 S al que ha bautizado como Viva A Vida, podría haberle costado al quarterback alrededor de los 2 millones de dólares.
Concederse un capricho de vez en cuando es casi una obligación para mantener el buen humor y recompensarse por el trabajo bien hecho. Esto es lo que ha debido pensar Tom Brady después de firmar un contrato de 50 millones de dólares con los Tampa Bay Buccaneers, ganadores de la Super Bowl 2021 en la pasada madrugada del domingo. El quarterback, que ya acumula siete anillos de campeón de la Super Bowl, ha decidido comprarse un yate para disfrutar del mar y la buena vida en familia durante su estancia en Florida, eso sí, siempre y cuando sus compromisos laborales se lo permitan.
Brady fue visto, el pasado mes de diciembre, en el puerto deportivo de San Petersburgo, Florida, recibiendo dicha embarcación. El modelo en cuestión es un Wajer 55 S, un yate de unos 16 metros de eslora, con capacidad para hasta cuatro personas y múltiples juguetes acuáticos, que puede ser operado con gran facilidad por una sola persona. En principio, este modelo se comercializa como una embarcación auxiliar, lo que resulta un tanto irónico dado sus exclusivas prestaciones. En lo que a características técnicas respecta, esta embarcación puede alcanzar unas 500 millas náuticas y una velocidad máxima de más de 40 nudos.
Destacan, también, sus guardabarros con botones, que se despliegan automáticamente para proteger los botes en los puertos deportivos, su plataforma de baño, que se extiende hacia afuera para conectarse a los muelles y su toldo delantero con postes de carbono, entre otras cosas.
El exquisito y lujoso diseño de esta embarcación, en la que Brady ha personalizado todo lo que ha podido, ha corrido a cargo de Sinot Exclusive Yacht Design, una firma holandesa que ha creado súper yates para constructores como Heesen y Feadship. Cromado en azul celeste, el nuevo juguete del quarterback incluye en su interior tecnología de última generación y todo tipo de extras.
Pero, lo que más llama la atención es el nombre con el que el deportista ha bautizado a su nuevo yate. Brady ha querido hacer un guiño a las labores sociales de su mujer, Gisele Bündchen, y le ha puesto Viva A Vida. Este es el nombre de la organización benéfica de la modelo cuyo objetivo es replantar más de 200.000 árboles en la selva amazónica y salvar el pulmón del continente de su preocupante deforestación. No es que este vehículo sea muy eficiente y ecológico, pero, al menos, espera poder promocionar dicha iniciativa con sus paseos por la costa.
Aunque la pregunta más importante es: ¿cuánto le ha costado este capricho al deportista? Se estima que Brady ha pagado por el Wajer 55 S personalizado alrededor de los 2 millones de dólares (1,6 millones de euros), una cifra bastante baja si se tiene en cuenta el dinero que va a ganar al año.
Fuente: ABC
