Es un sport cruiser realmente muy confortable que tiene divididas sus comodidades interiores y exteriores en el 50%.
Meritorio el diseño modular del cockpit con el asiento doble y giratorio de la timonera, el sofá invertido y las tres posiciones del asiento de popa. Todo muy funcional y adaptable a diferentes necesidades.
Otro punto a destacar es el gran francobordo que no solo la transmite, sino que da seguridad a los ocupantes.
Otorgan un plus adicional a los espacios al aire libre, la planchada extendida y la cubierta de proa que es prácticamente plana, lo que permite tomar sol con comodidad en ese lugar.
Algunos detalles para destacar: antes del acceso al interior cuenta con una trampa de agua, para que en caso de una fuerte lluvia sin el cerramiento, se pueda desagotar el cockpit rápidamente.
En popa, debajo del solárium cuenta con un generoso baúl. Ahí se guarda una mesa desmontable para armar en el cockpit y de esa manera transformar el espacio en un amplio living comedor.
El interior como ya mencionamos tiene buen volumen, está bien equipado de serie y vale destacar las comodidades del baño y el camarote a media eslora. Como mencionó Edi Branz en la nota, no le falta nada al barco.
Es una embarcación muy dócil en navegación, gira muy bien y en el corte de olas tiene una suavidad y eficiencia meritorias. Esto es consecuencia de un fondo con una V moderada en popa que va cobrando una importancia progresiva hacia proa.
Concluyendo, el Trento 275 Success está en un segmento muy competitivo en el mercado argentino, ofreciendo grandes virtudes que lo posicionan en una opción muy conveniente a la hora de pensar en un sport cruiser de casi 9 metros de eslora. Además, cuenta con un plus: la seriedad de un Astillero con 45 años de experiencia fabricando barcos…algo que no es poca cosa.