Un informe del Instituto Nacional del Agua adelanta que los niveles en la cuenca argentina del río oscilarán próximos a alturas bajas durante los próximos meses.
Después del repunte del verano, tanto los pronósticos climáticos como los hidrológicos anticipan que el río Paraná tendrá bajos niveles de caudales durante los próximos meses, como consecuencia de lluvias menores a las normales en la cuenca que lo abastece de agua. El río atraviesa una inédita situación de bajante extrema desde hace casi dos años, que generó una fuerte presión sobre todo el sistema ecológico y muchos problemas tanto para la navegación como para la provisión de agua potable.
En su último documento sobre escenarios hidrológicos para el período que va de marzo a mayo, el Instituto Nacional del Agua (INA) anticipa que “los niveles del Paraná en territorio argentino, incluyendo el Delta, quedarán oscilando próximos al límite de aguas bajas, con eventual agravamiento de corto plazo”.
En relación al clima, desde ese organismo señalaron que en base a los reportes del Servicio Meteorológico Nacional (SMN) “se espera un trimestre con condiciones normales a secas de precipitación, al igual que para la cuenca del río Paraguay, la cuenca media-inferior del Paraná y la cuenca del Uruguay”.
“De verificarse la tendencia climática, podrían reproducirse las condiciones de sequía y bajante observadas en el otoño de 2020”, alertaron los científicos.
El clima
Los resultados de diversos modelos de pronósticos muestran condiciones de La Niña para los próximos trimestres, lo que significa menos agua que lo normal. Desde el INA subrayaron que durante febrero se observaron “anomalías negativas” en gran parte de la cuenca del Plata, siendo las regiones del tramo inferior del río Paraná, cuenca del río Iguazú y cuenca alta del río Uruguay las más significativas. “El litoral argentino presentó anomalías negativas de lluvia mostrando un patrón típico de condiciones Niña”, dice el documento.
Si bien los resultados de los diferentes centros mundiales de pronóstico climático prevén condiciones normales en los próximos 3 meses, en la región del Litoral se esperan lluvias deficitarias, mientras que en toda la cuenca del Paraná esperan “condiciones normales a deficitarias”.
Los ríos del norte
Para el río Paraguay la tendencia predominante es descendente y lejos quedó la mejora de enero, ya que el patrón de distribución espacial de las lluvias no tuvo continuidad en febrero “y rápidamente se reprodujeron las condiciones de escasez y disminución de aportes de los afluentes”. “Se espera que durante este trimestre en el tramo compartido del río, los niveles se mantengan en leve recuperación, pero ubicándose por debajo de los promedios de los últimos 25 años para esta época del año” dijeron desde el Instituto.
En Brasil, el Paraná tiene un aporte acotado e inferior a lo normal: “se redujo fuertemente la actividad sobre la mitad sur de la alta cuenca y siguen siendo acotadas las lluvias sobre la mitad norte de la alta cuenca. El caudal aportado por esa mitad norte sigue siendo inferior al normal y los embalses no recuperaron sus reservas” detallaron los expertos en el informe.
También en la cuenca del río Iguazú la situación es contrastante entre los meses de enero y febrero con prevalencia de “una marcada anomalía negativa de lluvia”, lo que generó una disminución en los niveles y caudales del tramo. “El río en todo su curso se encuentra nuevamente oscilante con frecuentes lapsos de aguas bajas”, describieron desde el organismo estatal.
El tramo argentino/paraguayo del Paraná está con caudales estables pero inferiores a los normales. “La tendencia climática regional define un escenario hídrico inferior a lo normal por lo menos hasta mayo”, concluyeron.
Yaciretá
Según los reportes que el ente de gestión de la represa emite de forma periódica, tras un segundo semestre de 2019 caracterizado por precipitaciones inferiores a lo normal en la cuenca del Paraná de aporte a Yacyretá durante el pasado 2020 “se acentuó esta tendencia”. “En términos de caudales, a la altura del Complejo Hidroeléctrico Yacyretá en 2020 se verificó el menor caudal anual desde 1968”.
Por otra parte, informaron que durante el primer mes de 2021,el caudal promedio fue de 10.700 metros cúbicos por segundo, lo que representa apenas el 66% del caudal medio mensual para enero considerando la serie de referencia 1971/2020.
También destacaron que febrero comenzó con caudales normales “debido a los incrementos generados por las lluvias de fin de enero”, pero que luego se posicionó con caudales en consonancia con a la coyuntura hidrológica general del Paraná. “Febrero promedió un 77% del caudal medio mensual de la serie 1971-2020, mientras que marzo finalizó con un caudal promedio de 9.400 m3/s siendo este caudal igual al mínimo registrado, para el mismo mes, de la serie 1971-2020”.
Fuente: Aire Digital
