Especialistas remarcaron la importancia de cumplir con las medidas oficiales y la responsabilidad a la hora de pescar ante los bajos niveles del afluente, para no afectar la fauna íctica. Los registros se mantienen entre los más bajos de los últimos 25 años.
El río Paraná continúa atravesando una bajante del caudal de agua de características históricas para esta época del año y ante las pocas perspectivas de creciente significativa, especialistas remarcaron el alerta por la vulnerabilidad en la que se encuentran los peces. Desde la Universidad Nacional del Nordeste (Unne) señalaron la importancia de respetar las vedas y medidas establecidas, así como también la necesidad de responsabilidad a la hora de pescar.
Por otra parte el Instituto Nacional del Agua (INA) informó que la altura actual del río Paraná se encuentra en la mitad del valor promedio de junio de los últimos 25 años. Ayer el nivel del agua en las costas de la ciudad fue de 1,50 metro según la Prefectura Naval Argentina.
La especialista del Instituto de Ictiología del Nordeste (Inicne) de la Facultad de Ciencias Veterinarias de la Unne, Natalia Silva, dialogó con el área de prensa de la Unne y manifestó que por la bajante del río Paraná actualmente los recursos ícticos se encuentran en una situación vulnerable, pero hasta el momento no se hallan afectadas las condiciones de reproducción de los peces. Con respecto a la situación actual del cauce fluvial, la especialista expresó que “en estas circunstancias los peces se encuentran muy vulnerables por lo cual independientemente de las disposiciones provinciales sería bueno que todos los usuarios del río sean responsables al momento de pescar”.
Asimismo, Silva remarcó la necesidad del cumplimiento de las medidas establecidas por los gobiernos atravesados por el río Paraná. “Las pautas de manejo apropiadas son las que dispusieron las provincias de Chaco y Corrientes. La veda como medida precautoria para cuidar los recursos ícticos. Existen diferentes formas de vedar los recursos, puede ser una veda total de todas las modalidades de pesca o implementar la pesca con devolución hasta que el río vuelva a alturas normales”, detalló la especialista .
Por su parte, el INA señaló que los niveles del agua registran valores históricos de bajante y no se avizoran crecientes considerables de caudal en los próximos meses. “El río Paraná en territorio argentino presentó escasas lluvias. El caudal que ingresa al tramo sigue siendo del orden de la mitad del valor promedio de junio de los últimos 25 años. Los niveles no registran variaciones significativas, manteniéndose muy por debajo de los valores normales”, detalló el ente nacional en su informe periódico.
La ausencia de lluvias de volúmenes extraordinarios impedirá que el río Paraná muestre incrementos de caudal en el corto y mediano plazo, y según las estimaciones de las entidades nacionales especializadas en el monitoreo de los recursos hídricos, no deben aguardarse repuntes al menos hasta la primavera o el verano.
(FC)
Fuente: El Litoral