Ya robaron nueve motores fuera de borda. “Prefectura dice que no tiene jurisdicción y no hacen nada”, advirtieron
Al menos cinco delincuentes participaron el último martes del robo de un motor fuera de borda del Club de Pesca y Deportes Náuticos San Ignacio, logrando burlar la seguridad del predio, incluida la custodia policial que pagan los socios.
Lo llamativo del caso es que fue el noveno motor sustraído del mismo predio, lo que alarma y genera serias suspicacias.
En diálogo con El Territorio, fuentes del club precisaron que todos los hechos fueron denunciados ante la comisaría local, aunque la situación persiste.
El robo más reciente se registró el pasado martes y fue grabado por cámaras de seguridad.
“Nos robaron el noveno motor fuera de borda del club, a pesar que tenemos un destacamento de Prefectura a 500 metros, el Escuadrón de Gendarmería en la misma zona y dos policías que cumplen adicionales recorriendo el predio. Con todo eso, de un año a esta parte ya nos robaron nueve motores”, reclamó un socio.
En tanto, subrayó que cuentan con las imágenes del último caso, lo que podría permitir identificar a los malvivientes.
En la citada secuencia se observa cómo levantaron el motor entre cuatro hombres, mientras un quinto los guiaba, tras lo cual cargaron en un bote de madera que estaba amarrado a la orilla, por lo que se presume que cruzaron al Paraguay.
“Tierra de nadie”
En tal sentido, la misma fuente indicó que “en el video se nota que ya estaban cortados los cables y el motor separado del casco, porque los tipos llegaron y lo alzaron, no cortaron nada. Es decir, previamente alguien cortó caños y cables para que los otros se lo lleven”.
Por ello, según el consenso entre los socios del club, la banda que roba motores tendría algún colaborador interno.
“El predio está cercado, hay cámaras de seguridad, cuidador y servicio adicional de Policía. No hay forma de robarse un motor al azar, tiene que haber una inteligencia y una logística previa, alguien que aporte datos. Pero Prefectura dice que no tiene jurisdicción, Gendarmería se lava la manos y la Policía no hace nada”, se quejó.
En ese contexto, reclamó que los ocho robos anteriores fueron “calcados” al del último martes, lo que genera gran impotencia.
Por ello, reclamó que “nos roban, hacemos la denuncia y nada, sólo esperar hasta que nos vuelvan a robar. Lo malo es la reiteración abusiva. Es tierra de nadie”.
Fuente: El Territorio