Es la principal responsable del Luna, el segundo yate explorador más grande del mundo, y también del interiorismo de Loft Burés con su inconfundible estilo “art nouveau”.
Fundadora y directora del estudio que lleva su propio nombre, Kirsten Schwalgien es una de las diseñadoras de yates más perseguidas. La principal responsable del Luna, el segundo yate explorador más grande del mundo, ha revolucionado el sector con sus interiores atemporales de belleza poco convencional.
“Gesamtkunstwerk (obra de arte total en alemán) es el concepto que me inspira”, dice Kirsten.
Gesamtkunstwerk es el concepto en el que Kirsten Schwalgien ha hecho crecer la fama de su estudio especializado en la arquitectura de interiores y diseño de yates. Licenciada en Ingeniería de Interiores y Diseño de Producto de la Universidad de Ciencias Aplicadas de Mainz, ingresó en el campo del diseño de yates en Hamburgo y muy pronto asumió retos importantísimos. Trabaja para los amantes del mar, pero también en tierra firme como Loft Burés (Premio a la Excelencia en Arquitectura/ Interior de los Premios Alemanes de Diseño), acumula reconocimientos internacionales como el Muse Design Award de Nueva York, los Win Awards de Londres y el German Design Award de Frankfurt y recientemente ha sido nombrada miembro del jurado de los World Interior Awards 2021. Esta revolucionaria de los diseños flotantes, nos explica así los secretos de su éxito.
“Soy alemana y estoy arraigada a mi herencia, sobre todo a ese Gesanwtkuntwerk que me obliga a un enfoque de 360 grados que ve la síntesis de cada elemento de diseño como parte integral del proyecto en su conjunto. Pero el Mediterráneo me tiene enamorada, por eso escogí Barcelona cuando abrí mi propio estudio de diseño. Por eso y porque, además, la ciudad en sí es un centro excepcional de aficionados a la navegación”, afirma Kristen.
“Busco la excelencia en todo proyecto. Por eso la personalización y la búsqueda de materiales refinados son la quinta esencia de mis diseños, mi gran inspiración. No me impongo barreras. Para crear algo verdaderamente excepcional tienes que romper las normas de la convención. Tienes que creer en el poder de la innovación sin importar si desafías el status quo”, dice.
“Me acerco a todo lo que hago desde un prisma de pensamiento de vanguardia. Esto me permite crear espacios significativos que pueden desatar emociones e impactar en nuestra vida diaria”.
Los yates deben ser una expresión de la personalidad del cliente, por eso sus diseños deben alinearse con su gusto pero sobre todo con su estilo de vida.
“Tengo preferencia por los materiales naturales de la más alta calidad y su capacidad de revelar y realzar su belleza innata. Por eso colaboro con fabricantes, artistas y artesanos y experimentamos con tratamientos para desarrollar nuevos acabados de la madera, metales o piedras”, dice la diseñadora.
Fuente: La Vanguardia
