El antiguo piloto de fórmula 1 se sube a la embarcación del tenista para una visita que incluye partido de tenis de mesa y confidencias
La vida de Rafael Nadal se ha caracterizado siempre por su carácter espartano. Formado en una familia con estrictos principios, quien ha es una leyenda del tenis ha tenido que aceptar con las reglas marcadas por sus padres y su tío -también su entrenador durante gran parte de su carrera-, pero una vez cumplidos los 30 años decidió que era el momento de darse un capricho con el que había soñado siempre: comprarse en un yate. Ahora sabemos cómo es gracias a Nico Rosberg, el antiguo piloto de fórmula 1.
El alemán ha compartido en su canal de YouTube una visita al yate del español que incluyó el clásico tour para mostrar una embarcación cuyos espacios diseñaron por completo Rafael Nadal y su esposa, Xisca Perelló. El manacorense no tuvo problemas en compartir con el antiguo campeón de fórmula 1 todos los recovecos de su barco cuando estaba atracado en el puerto de Mónaco y los motivos por los que había distribuido de semejante manera la embarcación.
Para empezar, el yate cuenta con cuatro habitaciones con ocho camas repartidas en la parte baja, un salón o sala de estar enorme que conecta con la cocina y una cubierta pensada como una terraza para disfrutar del buen tiempo mediterráneo y puede que algunas fiestas.
Salón, dormitorios, cocina y muchas televisiones
La visita empezó en el espacioso salón al que se accede al poner el primer pie en el yate. Uno de los trucos que Rafael Nadal y Xisca Perelló decidieron para que el barco parezca más profundo fue dejar mucho espacio al salón y que el techo fuera un espejo que diera mayor sensación profundidad.
