Azimut expuso nada menos que nueve modelos en el Salón Náutico Internacional de Génova 2022, que terminó hace unos días. La marca cuenta con seis líneas diferentes de yates, que van desde los 13 a los 38 metros, pero con una cosa en común: ofrecer a los propietarios yates vanguardistas y de diseño con un gran atractivo emocional.
En el Salón que acaba de celebrarse, Azimut llevó la nueva joya de la línea Grande: el último Grande 26M. El verdadero buque insignia de un ambicioso proyecto: ser la nueva referencia de la categoría y ofrecer en sus dimensiones las mismas posibilidades que un megayate.
No es nada nuevo que la marca Azimut se enfrente al futuro, con soluciones innovadoras que nunca antes se habían probado, piense por ejemplo en la propulsión Pod: puesta en boga por ellos y hoy, la tecnología más exitosa del mercado.
Esta es también la base de las innovaciones que el astillero, junto con ZF, ha aportado a la Grande 26M. Gracias a su experiencia y a la continua investigación, este yate cuenta con un nuevo sistema de propulsión Pod 4600, instalado aquí por primera vez en el mundo.
El sistema, que combina este tipo de motor con una superestructura un 30% más ligera, gracias al uso extensivo de fibra de carbono, permite reducir el consumo de combustible en un 20% en comparación con una embarcación del mismo tamaño, a las distintas velocidades más frecuentes.
Este sorprendente resultado permite incluir el Grande 26M en la gama de yates de bajas emisiones de Azimut, que ya incluye la mitad de su gama. No es un logro menor, que confirma una vez más la visión innovadora y sostenible de Azimut, pionera en el ámbito náutico y líder mundial en el sector de los megayates.
El nuevo Grande 26 confirma todas las expectativas y las supera: en primer lugar, dispone los espacios interiores como en los superyates, y después, divide el flujo de la tripulación (situada en la proa) del de los invitados, para garantizar una total privacidad.
El elemento que realmente enamora del Grande 26M es la terraza Deck 2 Deck®: la terraza de los sueños, por encima del agua.
Esta particular terraza se obtiene gracias a la extensión del espejo de popa, que puede elevarse para transformar la bañera en un gran espacio suspendido entre el mar y el cielo, convirtiéndose así en una zona de estar y en un comedor, gracias a la gran mesa walkaround.
Un diseño sofisticado, un barco sinónimo de sencillez y elegancia con el máximo confort y las mínimas emisiones, que sin duda respeta la visión de Azimut, siempre.
Fuente: Todos los Barcos
