El Puerto de Punta del Este llega al verano con una demanda récord: todas sus amarras y plazas en guardería se encuentran completamente ocupadas
Según las autoridades portuarias, la marina ofrece cerca de 520–543 amarres en agua para embarcaciones, cifra que incluye marinas, muelles y boyas. A su vez, la guardería portuaria —el espacio donde se guardan embarcaciones en tierra— también se encuentra colmada, y diariamente se reciben decenas de nuevas solicitudes.
La situación es tan extrema que desde octubre ya no hay amarres disponibles para asignar, y la terminal informa que mantiene una lista de espera permanente de entre 180 y más de 200 embarcaciones. Muchas de ellas son yates y lanchas deportivas, muchas veces pertenecientes a náuticos del Cono Sur.
En cuanto a los costos, varía según la eslora del barco y la temporada. Para un yate promedio de 12 metros de eslora, el precio diario de amarra en temporada alta ronda los US$ 100 por día (aproximadamente US$ 8 por metro de eslora), aunque ese valor baja considerablemente fuera de temporada. Al costo de amarra hay que añadir consumos básicos como agua y electricidad del barco, cuya gestión es electrónica para ahorrar costos cuando el propietario está fuera del país.
La fuerte demanda se explica por varios factores: un aumento de la náutica de placer tras la pandemia, promociones anteriores de tarifas reducidas que atrajeron nuevos usuarios, y una migración creciente de embarcaciones de Argentina hacia la costa uruguaya. Las autoridades portuarias reconocen que el contexto es “histórico” —por la cantidad de reservas, la entrada masiva de barcos y la saturación de los espacios disponibles—.
Como resultado, muchas embarcaciones llegan a la bahía sin reserva confirmada y terminan varadas o fondeadas en espera de un lugar. En esos casos, los propietarios deben considerar alternativas, ya que el puerto no tiene margen para recibir más barcos en sus amarres ni en guardería.
En resumen: este verano, el Puerto de Punta del Este vive una temporada de récord absoluto —amarres agotados, guardería saturada, largas listas de espera y tarifas en alza. Si pensás amarrar tu embarcación allí, lo más prudente es hacer la reserva con suficiente anticipación o considerar puertos alternativos.
