La bajante del río Paraná superó niveles históricos, al punto de que no se registraban antecedentes similares en los últimos 30 años. En las últimas semanas, el problema se intensificó y el nivel ya está por debajo del metro de profundidad. Por ello, se decidió sobredragar el sector para beneficiar la navegación y carga de buques que llegan a los puertos, actividad considerada esencial con el fin de evitar más efectos negativos en la economía producto de la pandemia del coronavirus.
La bajante produjo, en el Paraná inferior, una pérdida de casi tres pies de profundidad en la hidrovía con el consecuente impacto negativo en la actividad agroexportadora, generando pérdidas en la capacidad de carga de los buques, y demoras y complicaciones en la navegación que se ve sensiblemente afectada en estas condiciones.
La vía navegable se encuentra, en la actualidad, por debajo del 80% del caudal de agua previsto para cumplir con la profundidad de diseño de 34 pies (10,95 metros).
En este contexto, el grupo Jan de Nul está realizando un esfuerzo adicional de sobredragado para sumar dos pies de profundidad y, de esa manera, contribuir a paliar la actual situación de bajante extraordinaria. En esta tarea, la compañía ha comprometido todos los recursos disponibles con el objetivo de contribuir a minimizar en el menor lapso de tiempo posible las consecuencias de este fenómeno.
Para tal fin, cinco dragas de la compañía y todos sus profesionales y técnicos se encuentran abocadas a la tarea las 24 horas del día, los siete días de la semana con el fin de poder contribuir con los productores y los exportadores a sostener su actividad en este difícil contexto.
Jan de Nul es una empresa familiar que tiene su origen en Bélgica, y está presente en más de 150 países. Es líder mundial en obras de infraestructura marítima, dragado, ingeniería civil y medio ambiente. Cuenta con más de 7.000 empleados a nivel mundial y en Argentina opera hace 25 años, empleando a 500 profesionales.
Las soluciones innovadoras son confiables en toda la industria, ya sea que se trate de la construcción de nuevos puertos, la instalación de los parques eólicos en alta mar o la reconversión de zonas industriales contaminadas. Hoy, le toca colaborar con el sobredragado del río Paraná.
Fuente: www.lacapital.com.ar