Con el Sunreef Ultima 111, el fabricante polaco ha dado a conocer un catamarán de 36,25 metros que combina un diseño contemporáneo con una preocupación por la sostenibilidad. Presentado en el Cannes Yachting Festival, este modelo cuenta con interiores de Phathom Studio y una distribución innovadora pensada para el confort de los pasajeros
Un diseño interior que combina minimalismo y facilidad de uso
La distribución del Sunreef Ultima 111 logra un equilibrio entre sofisticación y sencillez. La paleta de tonos tierra y materiales naturales crea un ambiente cálido, ideal para largas travesías. Esta armonía estética refleja la atención que presta Phathom a los detalles, combinando audacia y serenidad tanto en los espacios comunes como en los privados.
La integración de los principios del diseño biofílico âeuros, como las curvas orgánicas y el mobiliario purificado âeuros, fomenta una conexión relajante entre el hombre y el mar. El resultado es un interior fluido y relajante diseñado para atraer a los entusiastas de la navegación en busca de confort y modernidad.
Espacios optimizados para la vida a bordo
Diseñado para alojar hasta diez invitados en cinco espaciosos camarotes, el Ultima 111 ofrece un enfoque innovador de la distribución interior. Los camarotes están situados por encima de los cascos, una elección poco común que maximiza la luz natural y ofrece unas vistas panorámicas inigualables.
El salón principal ilustra esta búsqueda de apertura con balcones retráctiles. Estas extensiones transforman el espacio en una auténtica terraza al aire libre, ideal para cenas en alta mar. Además, el camarote del armador dispone de una terraza privada con acceso directo a la cubierta de proa, lo que añade un toque de exclusividad.
Uso meditado de los materiales
En un sector en el que las expectativas en materia de sostenibilidad son cada vez mayores, Sunreef utiliza materiales cuidadosamente seleccionados por su calidad y su bajo impacto ambiental. La madera natural, los tejidos ecorresponsables y los acabados minimalistas crean un interior sostenible y estéticamente agradable.
Esta elección subraya el deseo de alinear el lujo con las prácticas responsables, otro argumento para atraer a los propietarios preocupados por el impacto de su navegación.
Luz y conexión con el entorno
El catamarán se caracteriza por sus grandes superficies acristaladas y sus techos altos, que permiten una inmersión total en el paisaje marino. Estas características técnicas, poco comunes en catamaranes de este tamaño, refuerzan la sensación de estar cerca del agua, al tiempo que ofrecen espacios luminosos y agradables.
La distribución de concepto abierto y los ventanales también mejoran la impresión de espacio, un reto que a menudo se encuentra en los multicascos. Esta maestría arquitectónica es una verdadera ventaja para navegar cómodamente, incluso durante largos periodos.
Construcción impulsada por la innovación
Con 36,25 metros de eslora, el Sunreef Ultima 111 ilustra los conocimientos técnicos de su astillero. Aunque no se mencionan detalles del sistema de propulsión, cabe esperar opciones híbridas o eléctricas, en línea con la estrategia ecorresponsable de Sunreef.
El casco multicasco proporciona una mayor estabilidad y un rendimiento optimizado para quienes buscan travesías cómodas sin comprometer la seguridad.
Hacia una evolución del diseño náutico
El Sunreef Ultima 111 allana el camino para una nueva generación de catamaranes, en los que el diseño ya no es sólo atractivo visualmente, sino que se convierte en una palanca para el confort, la durabilidad y la experiencia en el mar. Este modelo debería inspirar a otros constructores a incorporar prácticas responsables y accesorios vanguardistas en sus futuros proyectos.
Para los amantes de los yates de lujo, es un ejemplo a seguir, que combina el refinamiento con el respeto por el entorno marino.
Fuente: Barcos News