“Me dolía hasta el apellido y estaba lento como una tortuga, pero bueno, me saqué las ganas”, comentó el mandatario. El hecho ocurrió hace dos semanas en Maldonado.
Luis Lacalle Pou se dio el gusto y volvió al agua por primera vez desde que asumió como presidente de la República para surfear.
“Me dolía hasta el apellido y estaba lento como una tortuga, pero bueno, me saqué las ganas”, comentó al sitio Duke, especializado en surf.
El mandatario contó que dos semanas atrás se hizo un hueco en su agenda en una remota playa de la costa de Maldonado. Se metió en el mar sobre las 7.30 horas de la mañana y al mediodía ya estaba en una reunión oficial.
Justamente la semana pasada Lacalle Pou saludó a los surfistas en el día internacional de ese deporte con foto propia. El mensaje estuvo acompañado de una foto donde se lo observa dentro de una ola en las playas de Las Flores en El Salvador.
Una pasión
Desde antes de ser presidente Lacalle Pou mostró su afición por el surf, un deporte que conoció de muy chico y que hoy comparte con sus hijos.
A mediados de los 80 comenzó a practicarlo en Florianópolis. Luego lo hizo en La Barra de Maldonado donde su padre, Luis Alberto Lacalle Herrera, compró una casa de veraneo. En ese entonces “compartía el agua con el destacado surfer de la época, Christian Hunt, y quienes luego fueron campeones nacionales, Josepe Pereira y Matías Temesio”, consignó el portal Duke a fines del año pasado cuando se preguntaba si “es el primer presidente verdaderamente surfer de la historia”.
En 1998, Lacalle Pou se recibió de abogado y como forma de celebrar se fue a Hawái, California y Costa Rica con su tabla de surf. En una entrevista otorgada el año pasado a radio Océano, reconoció que allí “surfeó las olas más peligrosas de su vida”.
Fuente: Diario El País