El Swan 58 es el primero de esta medida del astillero de Pietarsaari, un gran crucero diseño de German Frers que se empapa sin embargo de las virtudes de los modelos de similar eslora que le han precedido, especialmente el Swan 48 presentado en 2019 del que retoma con algunas variables las probadas formas del diseño del casco en lo que se refiere a potencia, equilibrio y comportamiento marinero.
No hay otra manera de definir al Swan 58 que como un lujoso crucero de altura que puede llevar a su armador a donde desee prácticamente sin restricciones en confort, autonomía y por supuesto seguridad.
German Frers explica el concepto destacando que “las secciones de proa han sido suavizadas con la idea de que lograr un comportamiento más dúctil en ceñida, en las condiciones más habituales de fuerza 4-5”. Por lo demás, las formas del casco han sido estudiadas para que el barco obtenga un ángulo de escora óptimo a 20° con un paso de la ola dócil, sin cabeceos ni dejarse dominarNo menos importante es, en un barco que debe poder permitir que el propietario y su familia puedan alcanzar cualquier puerto y pasar largas temporadas a bordo, encontrar el equilibrio entre una eslora que permita su manejo sin necesidad de tripulación —otro de los objetivos del diseño y distribución de la maniobra de esta unidad— y la habitabilidad y volumen necesarios para albergar todo el equipamiento que el estilo de vida actual y un programa de este tipo requieren. En este sentido, el diseño de este nuevo modelo permite habilitar tres cabinas completas con su baño más una cuarta si así se desea, un confortable salón, una cocina capaz y bien agenciada e incluso una cabina de marinería si se hiciese necesaria.
No hay un barco para un armador concreto a menos que sea construido a la unidad, pero podemos decir que el Swan 58 se le acerca. Así, sobre la base de los dos timones de serie, su propietario puede elegir entre cuatro opciones de quilla: estándar, corta, telescópica y de regata, esta última acompañada de un completo pack que incluye mayor trapezoidal, botalón de regata y un aparejo y acastillaje de cubierta de competición.
Es gracias a esta polivalencia de programa que el propio diseñador está convencido de que “este nuevo modelo se convertirá en un clásico que permanecerá joven activo durante muchos años”.
Atendiendo a la calidad de construcción, acabados y equipamiento vistos durante nuestra prueba en el marco del European Yacht of the Year, premio al que era candidato en la categoría de Crucero de Lujo podemos afirmar sin lugar a equivocarnos que el Swan 58 mantendrá además su valor con el paso del tiempo, con lo que su propietario puede estar seguro de que el dinero que invierta en él no se desvanecerá. Basta detenerse un momento en la construcción, antes de centrarnos en la cubierta y la maniobra, para ratificar esta afirmación: resaltemos que el Swan 58 está construido en fibra y sándwich de espuma, con la estructura de los fondos monolítica y sobredimensionada y con refuerzos estructurales y cadenotes de carbono, resinas viniléster e infusión al vacío postcurado. Hay dos mamparos 100% estancos en composite, todos los depósitos y la mayor parte del pese se encuentra centrado, y en la base del casco y de serie se entrega con teca de 9 mm en pasavantes, bañera y plataforma. Todo un punto de partida.
Cubierta
Siguiendo la evolución del Swan 48, el 58 ofrece numerosas y nuevas características diferenciales en cubierta. Por ejemplo este es el primer Swan de este tamaño con banquetas en L flanqueando dos mesas que pueden bajarse a voluntad para convertirse en mesillas bajas o solárium y que pueden unirse conformando una gran mesa para ocho comensales.
A popa del tambucho y de esta zona reservada a estar, bien protegida por la capota antirociones que se esconde en el tejadillo y cuyo frontal puede abrirse indistintamente así como un bimini muy fácil de montar, el área de maniobra se ha diseñado para facilitar que pueda usarse por una tripulación familiar o para que en regatas una tripulación completa circule con comodidad.
La zona más popera tras los pedestales de rueda se reserva a estar, acompañamiento, solárium y acceso al mar mediante la plataforma de baño que se forma al abatir el espejo. Tras él el garaje permite alberga una RIB de 3 metros y acceder a la timonería.
El barco se entrega de serie con cinco winches eléctricos y la escota de mayor en un winche central en el plan de la bañera, si bien puede opcionalmente instalarse un winche cautivo.
Otro aspecto a destacar es la amplia zona a proa del palo, específicamente diseña para permitir la instalación de colchonetas de solárium , y en la que opcionalmente puede instalarse también un carril de foque autovirante.
Por su parte los carriles de escota de génova están ubicados en las bandas del tejadillo, una posición que proporciona el mejor ángulo de trimado y que además deja totalmente despejados los pasavantes para facilitar la circulación.
En el triángulo de proa proporciona un gran cofre para velas y acastillaje. El cofre de anclas se ha dispuesto muy retrasado respecto a la proa, de forma que contribuye también, junto a la posición central de los depósitos, repartidos en el fondo para bajar el centro de gravedad, a atrasar los pesos y reducir el cabeceo.
En el plan de la bañera encontramos grandes cofres a las bandas, uno de los cuales puede contener una heladera, y hay sacos de cabos y espacio dedicado para la balsa de salvamento.
Interior
Ya hemos dicho que la vocación de este barco es la navegación de altura. El interior responde plenamente a este concepto, con una distribución que contempla de serie tres cabinas con sus baños. Las dos de popa se dotan de camas individuales que pueden convertirse en dobles añadiendo un colchón central, o también puede especificarse que alguna de ellas se equipe con cama doble a todo lo ancho.
La de proa ofrece una cama central king size accesible desde las bandas, aunque opcionalmente puede solicitarse también con dos camas individuales.
El triángulo de proa por su parte es lo suficientemente grande como para instalar en él una cabina completa para tripulante, con wc y lavamanos.
También como opcional, puede colocarse una cuarta cabina con literas superpuestas en el espacio ocupado por la mesa de cartas, sin merma en el volumen de la cabina de popa estribor, pero sí en el espacio del navegante, que en este caso quedaría reducido a su mínima expresión aunque sin pérdida funcional ya que permite mantener incluso un armario bajo con cajones y estanterías con guardamares adosado al mamparo de esta cuarta cabina. El asiento es pivotante y se esconde bajo la mesa cuando no se usa.
Como corresponde a un velero de crucero de este programa, la cocina es en U para poder trabajar con seguridad y comodidad en ella incluso en malas condiciones de mar, ofrece gran capacidad de estiba, una superficie anexa a modo de útil mesilla pasaplatos con cajones o para depositar pequeños objetos cerca de la bajada del tambucho.
El salón también ofrece números cofres de estiba a la altura de los ojos y bajo las banquetas, así como estanterías, un mueble bar y un televisor plano escamoteable. Un elemento a destacar es el armario a toda la altura junto a la base del palo que ejerce a modo de central eléctrica de control y concentra todos los interruptores, relés, fusibles y pantallas de control de la energía y sistemas a bordo del barco de forma que el propietario lo tiene todo centralizado y a la vista y facilita, por otra parte, que en caso de detectarse un problema pueda solucionarse a distancia con ayuda de los ingenieros del astillero.
Otro aspecto destacable es la accesibilidad de la sala de máquinas, que aunque no contiene todos los elementos –el cargador/inversor se encuentra bajo una banqueta del salón— sí que ofrece espacio para el generador. La redundancia en algunos sistemas es un plus en navegación oceánica para facilitar la vida a bordo. Un registro frente al acceso de la sala de máquinas concentra las bombas de agua dulce, que son dos y en serie, de forma que si una no funciona, la otra la sustituye automáticamente y también hay doble sistema de filtro de combustible en paralelo y conmutable.
Navegación
La impresión a la rueda es que nos encontramos a bordo de un crucero rápido que es capaz de mantener unas velocidades medias en torno o por encima de los 7 nudos con un viento de 7-10 nudos y 30-35 grados de ceñida, que son las condiciones en que navegamos a bordo del Swan 58 en aguas de Port Ginesta, en Barcelona. Con el código 0 es fácil superar los 10 nudos y mantener siempre el control del barco con total tranquilidad. Es un barco que permite mantener todo el trapo arriba en un amplio rango de viento sin que se resienta su equilibrio y estabilidad dirección, con un gobierno suave y un ataque de la ola armonioso y confortable.
No hay duda de que pese a tratarse de un crucero rápido, una familia puede llevarlo con total tranquilidad —siempre conscientes de que las cargas son las de casi un 60 pies— con todos los controles a mano y una completa visibilidad hacia proa gracias a la posición elevada sobre las bandas de los bancos de gobierno laterales.
En suma, un crucero de altura en el que el lujo se encuentra en la construcción, el diseño de la maniobra, el acastillaje, el equipamiento y los acabados, capaz de llevar a su propietario tan lejos como desee y en el límite de requerir tripulación adicional ya que puede gobernarse perfectamente con poca tripulación.
Fuente: Náutica y Yates