estación de carga en alta mar para barcos eléctricos

Esta nueva tecnología es el equivalente a las estaciones de carga de los coches eléctricos, pero dedicada a barcos de todos los tamaños que estén en alta mar

Stillstrom, “energía silenciosa” en danés, es una nueva compañía que quiere ser la primera en lanzar al mercado plataformas de carga a gran escala para barcos. Estas estaciones usarán la energía eléctrica suministrada por centrales eólicas flotantes para alimentar a los buques cerca de puertos y en alta mar.

Según el último Informe medioambiental Europeo sobre el transporte marítimo, los barcos son responsables del 13,5% de las emisiones de gases de efecto invernadero provocadas por el transporte en la UE y suponen el 3% de la polución global. Aunque a día de hoy la gran mayoría de barcos utilizan combustibles fósiles para funcionar hay iniciativas que ya están allanando el terreno para una futura transición a motores eléctricos.

La estación de carga que plantea Stillstrom busca evitar las emisiones que producen los barcos cuando están parados en alta mar o mientras esperan a que les den acceso al puerto para soltar o recoger su mercancía. La capacidad de estas boyas de carga, afirma la compañía, será lo suficiente como para alimentar una batería de tamaño SOV o un buque eléctrico híbrido. Aunque quieren ampliar y adaptar esta misma tecnología para que pueda suministrar energía a embarcaciones de todos los tamaños.

La primera prueba de este sistema se llevará a cabo en el tercer trimestre de 2022. El plan es hacer que una de estas estaciones boya suministre energía durante la noche a uno de los buques de la compañía Orsted. Esta compañía, también danesa, desarrolla, construye y explota parques eólicos terrestres y marinos en distintos lugares del planeta. Entre esos proyectos está el Hornsea 2, un parque situado cerca de la costa británica que a día de hoy es la central eólica flotante más grande del mundo.

Orsted será también la responsable de integrar la boya de carga a su red eléctrica y, según afirman, tienen la intención de hacer públicos todos los diseños de este proceso para que pueda replicarse en otros lugares.

Stillstrom es la última aventura empresarial de Maersk Supply Service, una filial del gigante naviero danés Maersk. “El objetivo es eliminar 5,5 millones de toneladas de CO2 en un plazo de cinco años desde el lanzamiento comercial, eliminando además las partículas, los NOx y los SOx”, afirma Sebastian Klasterer Toft, director del programa Venture de Maersk Supply Service.

Preparando la llegada de los buques eléctricos

Stillstrom no es el primer modelo de estación flotante que vemos. Recientemente se anunció SeaRAY, una especie de batería gigante que funciona bajo el agua y que es capaz de cargarse sola gracias a las corrientes marinas. El objetivo de SeaRAY es dotar de energía eléctrica tanto a barcos como a pequeños vehículos de investigación como los drones submarinos.

Creada por investigadores del Laboratorio Nacional de Energías Renovables de los EE.UU. (NREL) y la compañía americana C Power, el prototipo ya se ha probado en el océano pacífico, al norte de la isla hawaiana de O’ahu. SeaRAY cuenta también con un sistema de recolección de datos que mide cómo reacciona la plataforma a las olas, las corrientes o las ráfagas de viento y que sirve para que los científicos puedan evaluar su correcto funcionamiento.

La proporción de barcos eléctricos es escasa todavía, algunos análisis sostienen que solo un 2% lo son, pero se prevé que este mercado crezca de 4.700 millones de dólares (4.212 millones de euros) de 2021 a 16.200 millones (14.528 millones de euros) en 2030. Esta tendencia irá a más con el tiempo y seguro que veremos más ejemplos de estaciones de carga marinas con nuevas tecnologías en los próximos años.

“Hay muchos diseños diferentes por ahí”, comenta Rebecca Fao, investigadora del NREL. “Cada desarrollador tiene su propia metodología para extraer energía de las olas”.

Fuente: El Confidencial

AVISO CEFIRO VENTILADORES

Artículo anteriorHOY EN ESLORAS PRESENTAMOS LA RENOVADA ECLIPSE 22 CUDDY DE ARCO IRIS
Artículo siguienteSANTA FE – POR LA EXTREMA BAJANTE DEL RIO, EL 40 % DE LAS EMBARCACIONES NO PUEDEN NAVEGAR